La Corte Suprema condenó a un odontólogo a pagar 82 millones de pesos a un paciente luego de dañarle un nervio durante un procedimiento dental.
El fallo estableció que el profesional no tomó las precauciones necesarias, lo que resultó en una lesión permanente para el paciente.
“El profesional no tomó las precauciones necesarias”, indicó la sentencia, resaltando la responsabilidad del odontólogo en este caso. El paciente sufrió daños irreparables debido a la negligencia durante el tratamiento dental.
El odontólogo argumentó que la lesión fue un riesgo conocido del procedimiento, sin embargo, la Corte determinó que la falta de cuidado y diligencia del profesional fue la causa directa del daño al nervio del paciente.
“La falta de cuidado y diligencia del profesional fue la causa directa del daño”, afirmó la sentencia, dejando en claro la responsabilidad civil del odontólogo en este incidente.
La indemnización de 82 millones de pesos fue establecida como compensación por los daños sufridos por el paciente.
Este caso destaca la importancia de que los profesionales de la salud, incluidos los odontólogos, cumplan con los estándares de cuidado y tomen todas las medidas necesarias para evitar daños a sus pacientes.
La negligencia en el ejercicio de la profesión puede tener consecuencias graves tanto para el paciente como para el profesional.